¿Cuántas veces paseamos por la calle y nos da pena ver todo lleno de colillas? ¿Se podrá hacer algo con ellas? ¿Qué sucede con todo el material que el ser humano desecha? Esto mismo pensó Alexandra Guerrero. Cansada de ver su ciudad natal, en Chile, llena de colillas decidió recogerlas ella misma y crear el proyecto Mantis. Un proyecto que nació para su tésis de final de carrera pero que ha dado mucho de qué hablar.
Después de un proceso de esterilización a vapor y bajo presión, las colillas pueden ser transformadas en fibras gracias a la mezcla de éstas con otras sustancias o materiales como puede ser la lana. El resultado es una fibra con la cual poder crear vestidos, ropa, tejer…
Además, gracias al proceso de esterilización de las colillas, se está probando el uso del líquido producido para la creación de insecticidas biológicos.
Creemos que avances como estos nos pueden ayudar a mantener nuestro planeta más limpio. Y siempre nos gusta estar informados sobre las investigaciones en los distintos tipos de fibras.